Caninos encuentros

como te fuiste
volviste:
por avieso periplo
suelto
vago y loco
Viejo amigo
que sigues
mis destierros
travesías
y entierros:
chiflado
orejudo
tierno y mimoso
Yo monje suelto
cabescorvo y bigardo
más perdido
que Ulises
-o que un niño
en su primer día
de colegio
Y un día olí
tu bafo almagro
húmedo
color de molibdeno
... y desí vino
adiano 
encuentro

(Brasilia septiembre de 2015)

¿A quien amas?

  

(A Sri Maha Krishna Swami)

¿Que estás apasionada por mí hija mía?

Observa bien lo que estás sintiendo,

y sobre todo lo que estás mirando.

¿Como te puedes apasionar por un espíritu,

que no tiene forma, ni rostro, ni identidad?

Abre bien tus ojos y sintoniza bien tus oídos

para que percibas mi vibrar que permanece activo,

aún después del tránsito de las épocas y del crepúsculo

de variables y fortuitos atardeceres idos

(marcados con mi hálito en el fino tejido de tu alma).

He tejido allí la huella de tu pisada indeleble,

y la percepción del toque de tus dedos en mi mano

permanece como testigo de mi promesa de sentirte

nuevamente, de tocar tus ojos y escuchar tu aliento.

Me verás en las pálpebras herméticas, fijas y acentuadas,

esbozadas en la quietud del sueño de los niños,

que recibieron la caricia esencial que aproxima el conforto

y la tranquilidad sobre un venturoso despertar.

Me percibirás en el devotado mirar de los animales

que procuran asiduos y tiernos el alimento entre tus manos,

y me declaro también en el suave y claro sonido

que emiten de los remotos riachuelos que aún no fueron

desarmonizados por la mano inconciente del hombre.

(Y estoy también en el leve sonido que produce

tu pie desnudo al pisar las hojas caídas de los árboles,

en el sinuoso camino que tocas y transitas,

en los suaves atardeceres que ya pronuncian

el canto de la tranquila noche, hasta tu morada).

Me verás también en el vuelo de los pájaros

y en la suave fragancia que exhala la hierva húmeda

en las horas tempranas del amanecer.

Cambiaré mi rostro muchas veces

y múltiples fases de mi mirar esparciré

por todos lados, en diferentes atardeceres

y en diferentes épocas y locales,

en los que deslizarás soñando nuevos sueños,

(quizás transites por otros ya vividos).

Vendré suavemente como la brisa para despertar,

tu mirada de frágiles sueños que no son realidad.

Estaré en la temperancia que manifiestan los árboles

de los pausados bosques que permanecen intocados.

Allí me encontrarás como siempre he sido

y como tú has sido también:

yo siempre tuyo y tú siempre mía,

y yo siempre mío y tú siempre tuya;

unidos y concientes de que somos la propia Eternidad.

No te confundas para que no te sofoques,

en las múltiples fases que me mostraré,

pues por eso sufre tanto esta humanidad:

sus hijos se apasionan por cualquier cosa

y por cualquier faz, menos por la Divinidad.

Dialogo con el Maestro

"Más importante que practicar diariamente alguna técnica de meditación es recordar el silencio interior durante el día".

En la comunicación silenciosa no hay argumentos ni contestaciones. No hay reclamaciones ni pedidos de dis-culpas. Sólo hay presencia y la percepción clara del Ser. Es decir, hay definitivamente un dialogo honesto.

Permaneciendo en ese estado natural cualquier palabra pro-anunciada será un bálsamo para el oyente y para quien la pronuncia. Ella revelará la Verdad que sustenta el universo y se sentirá como una manifestación del Verbo.

...Dios acontece en cada silencioso instante de nuestras vidas.

Soñador y despertar

¿Acertar o errar al final te perturban?

deja que quien lance la flecha sea el Arquero,

la flecha eres tú,

y el blanco por bien serás tú y será El.

¿Como una misma flecha pode llegar a tantos parajes

y al mismo tiempo?

Sólo lo entenderías cuando percibas

que tú y Arquero comparten el mismo lugar.

O quizás sean innúmeras flechas,

que representan cada sueño

que Tú sueñas, Señor.

Y que llegan a tu morada que no tiene dueño.

¿Es la flecha sólo un sueño?

Acierto y error no tienen dilemas

(dilemas sólo atraen problemas

cuando se siente miedo de errar).

Y así diremos algún día

que acertamos y erramos en el mismo lugar:

acertamos y erramos aquí y en este ahora,

dentro de la casa que no tiene dueño,

sin piso, sin paredes sin techo,

allí el eterno Arquero sueña…

Y su casa es tu casa

(y la mía también).

Soñaremos juntos

hasta despertar

del soñado sueño y descubrirnos juntos (un día...)

¡Amando tanto!

en el infinito y eterno Soñador.

Por favor, no tengas miedo de errar,

lanza ahora Tu flecha, su flecha y la mía.

...Ya no sentimos miedo de amar...

Sentimiento (sine dubio summus sensus)

(A Sutra Maha Devi)

Los miedos más recónditos describen pasajes estrechos,

y claros para la libertad (sólo cabes tú),

y a lo que más tememos nos puede libertar.

Mira bien, con el mismo mirar con el que Dios te ve:

sentirás su compasión: especialmente en lo tú que más temes.

Esa compasión  libertadora,  acogedora y tierna:

silenciosa y cálida Compasión,

que profundo y noble sentir.

Descubrir que todo te compone, que todo te soporta:

el más simple insecto y la más bella estrella te soportan,

y te sustentan: ¡Tú sustentas Todo!

Las pruebas que pasé, los caminos espinosos que crucé,

y al final me dices que te encontré…

Y después me susurras que nunca hubo comienzo,

y que este final es el comienzo de todo,

y que no tendrá fin.

Sólo Tú eres el fin, comencé en ti y llego a ti, Señor.

Y no encuentro nada ni a nadie, sólo Tú,

y  a Todos y al Todo en Ti.

Y me dices que ninguna ciencia te tocó,

que ninguna idea te alcanzó.

Y que no era para entenderte.

Era para sólo para sentirte 

(en cada prueba, en cada instante).

Y ahora ya no te siento:

sólo Tú te sientes y sólo Tú me sientes

.......................

Lo importante de cada quien

Lo que se escribe en este espacio es inspirado en otros escritos

y en otras palabras dichas y no dichas

(mas sentidas por ti y por mí).

Lo importante no es lo que se escribe - el texto.

Ni quien lo escribe - el autor.

Lo fundamental es quien inspira el texto,

y quien sustenta y da vida a cada átomo y partícula

(del autor y del lector).

Un Poema de Swami Tilak

ENCIENDE MI LUZ CON TU LUZ (SWAMI TILAK)

Enciéndeme con Tu Luz,

¡Oh! Sat Gurú enciende mi luz con Tu Luz.

Elimina las obscuridades que cubren mi corazón.

Oh Señor del Yoga, Oh Señor del Conocimiento,

Oh Señor de Todos, Oh Supremo Maestro.

Derrama Tu Gracia sobre nosotros.

Nosotros tus hijos hemos llegado a tu puerta.

Muéstranos tu forma propicia.

Te adoramos postrándonos ante Ti.

Derrama el néctar de tu amor sobre nosotros.

Despierta esta Chiti-Shakti que ha estado dormida

dentro de nosotros durante milenios.

La Verdadera Llama está viva en nuestros corazones.

Despierta la música de Soham (Yo soy Aquello).

¡Oh imperecedero! Deja que ofrezcamos nuestras vidas a Tus Pies.

Tú eres la Madre, Tú eres el Padre,

Tú eres el hermano, Tú eres el amigo,

Tú eres el Conocimiento y la Sabiduría y Tú eres la riqueza.

¡Eres todo para mí Oh Señor Dios de dioses!

Elimina todas mis preocupaciones y desgracias. ¡Ten

misericordia Oh Señor!

¡Que el Templo de mi mente se ilumine con Tu Conocimiento Puro!

“Donde brilla el Ser, no brilla el Sol ni la Luna, ni las Estrellas,

Ni el relámpago; allí no hay fuego tampoco.

Todo brilla porque brilla el Ser.

El Ser es Todo”