(A Sutra Maha Devi)
Los miedos más recónditos describen pasajes estrechos,
y claros para la libertad (sólo cabes tú),
y a lo que más tememos nos puede libertar.
Mira bien, con el mismo mirar con el que Dios te ve:
sentirás su compasión: especialmente en lo tú que más temes.
Esa compasión libertadora, acogedora y tierna:
silenciosa y cálida Compasión,
que profundo y noble sentir.
Descubrir que todo te compone, que todo te soporta:
el más simple insecto y la más bella estrella te soportan,
y te sustentan: ¡Tú sustentas Todo!
Las pruebas que pasé, los caminos espinosos que crucé,
y al final me dices que te encontré…
Y después me susurras que nunca hubo comienzo,
y que este final es el comienzo de todo,
y que no tendrá fin.
Sólo Tú eres el fin, comencé en ti y llego a ti, Señor.
Y no encuentro nada ni a nadie, sólo Tú,
y a Todos y al Todo en Ti.
Y me dices que ninguna ciencia te tocó,
que ninguna idea te alcanzó.
Y que no era para entenderte.
Era para sólo para sentirte
(en cada prueba, en cada instante).
Y ahora ya no te siento:
sólo Tú te sientes y sólo Tú me sientes
.......................
